¿Qué significa Proverbios 10:18?
El odio es un pecado grave, y representa totalmente lo opuesto a la virtud del amor. El amor hace que una persona se sacrifique por aquellos y aquellas a las que ama, pero el odio desea el mal para las personas que lo reciben (Romanos 12:9). El odio usa las mentiras y los engaños en contra de sus víctimas. A menudo, una persona odiosa trata de esconder el desprecio que siente por los demás, e incluso trata de fingir que no odia a las personas que en realidad odia. Esto da pie a la hipocresía, otro pecado que ofende muchísimo al Señor (1 Pedro 2:1). Ese tipo de odio oculto puede pasar desapercibido en el mundo, pero Dios lo ve y nunca lo dejará pasar como si no fuera nada (Hebreos 4:13).Por otra parte, una persona odiosa puede optar por hablar abiertamente en contra de la persona a la que odia, o iniciar rumores con la intención de arruinar su reputación (Salmo 101:5; Colosenses 3:8), o insultarla. Los enemigos de David calumniaron a David en varias ocasiones (Salmo 41:5–8), y los enemigos de Jesús insultaron a Jesús también. Mientras Jesús estaba colgado en la cruz, "los que pasaban se burlaban de él" (Mateo 27:39), y "también se burlaban de él los principales sacerdotes, los escribas, los fariseos y los ancianos" (Mateo 27:41).
Las personas que se dedican abiertamente a odiar a los demás corren el riesgo de sufrir las consecuencias de ese mismo odio (Proverbios 10:10–13). El odio hace que las personas que odian también acaben siendo odiadas por el mundo.