¿Qué significa Proverbios 10:32?

Es interesante ver la manera en que los justos "dicen" palabras, pero los impíos las arrojan, lo cual implica que los justos tienen cuidado con lo que dicen, pero los impíos las dejan salir de sus bocas sin pensar con quién están hablando ni el contexto en el que se encuentran. Las personas sabias saben qué decir correctamente (Proverbios 10:13), y cuándo es mejor no hablar en absoluto (Proverbios 10:19). Las personas malvadas tienden a decir cosas odiosas que causan problemas (Proverbios 10:18), y saben muy bien que no están siendo razonables (Proverbios 10:23).

Cuando Jesús habló en la sinagoga de Nazaret, Sus palabras impresionaron mucho a todas las personas que estaban allí: "todos hablaban bien de él y se quedaban asombrados de las palabras de gracia que emanaban de sus labios, y se preguntaban: «¿Acaso no es éste el hijo de José?" (Lucas 4:22). En la Biblia se nos enseña mucho sobre la importancia que tiene el hecho de hablar con gracia para que sepamos qué palabras le agradan a Dios y bendicen a los demás. El habla que viene del pecado no proviene necesariamente de una falta de conocimiento sino de un corazón desobediente. Las personas malvadas también saben lo que es hablar con gracia, pero aun así eligen emplear un lenguaje pervertido y retorcido. Debido a que su corazón está corrompido, de su boca emanan palabras corruptas.

El problema de este tipo de pecado no se basa en el tipo de sílabas o sonidos que pronunciamos. De hecho, el hecho de si algo es inapropiado o no lo es varía drásticamente según la cultura y la región en la que nos encontremos. La intención es lo que importa, y este es un problema importante de la cultura moderna. Hoy en día, el lenguaje que vemos en las películas, la música y la televisión es ofensivo por el mero hecho de serlo, y hay muchas personas que hablan de la misma manera. En cambio, de la sabiduría emana un diálogo aceptable, mientras que la falta de sabiduría produce un discurso ofensivo y pervertido. El hecho de que haya tantas personas que hablen de una manera tan corrompida dice mucho del estado espiritual del mundo en estos momentos.