¿Qué significa Proverbios 12:16?
Durante el versículo anterior (Proverbios 12:15) se nos habló de un "necio" como si fuera una persona testaruda, terca o que se resiste a escuchar los consejos de los demás. Cuando una persona así se enoja, quizás debido a que alguien la insulta o no está de acuerdo con otra persona, pierde el control y muestra su ira rápidamente. En cambio, una persona sabia mantiene la calma en circunstancias similares. Es interesante darse cuenta de la manera en que las personas que no quieren que nadie las corrijan (Proverbios 1:7), al mismo tiempo sucumben rápidamente ante sus propias frustraciones. Sin lugar a duda, el problema fundamental de una persona así es la arrogancia y el egoísmo que habitan en su corazón.En cambio, una persona sabia controla sus emociones y no pierde los estribos cuando la provocan. Tiene dominio propio, el cual viene provocado por el Espíritu Santo, quien habita en su corazón (Gálatas 5:22–23). El apóstol Pedro nos recuerda que Jesús no insultó a las personas que lo insultaron, ni tampoco amenazó a los demás cuando él mismo estaba siendo castigado. En cambio, "emitía su causa al que juzga con justicia" (1 Pedro 2:23). En 1 Pedro 3:9–11, Pedro dice: "…no devuelvan mal por mal, ni maldición por maldición. Al contrario, bendigan, pues ustedes fueron llamados para recibir bendición, porque: «el que quiera amar la vida y llegar a ver días buenos, debe refrenar su lengua del mal, y sus labios no deben mentir. Debe apartarse del mal y hacer el bien, buscar la paz, y seguirla". Las personas que saben mantener la calma durante los momentos difíciles muestran la sabiduría y la piedad que habitan en sus corazones.