¿Qué significa Proverbios 13:6?
La "justicia" aquí es un término que se refiere a las personas que sinceramente hacen todo lo posible para cumplir la voluntad de Dios y obedecen todos Sus mandamientos (Proverbios 1:7). Las personas que viven una vida basada en la piedad y en la sabiduría generalmente viven mucho mejor y más tranquilas (Proverbios 3:6; 12:28). En cambio, las personas que ignoran a Dios se exponen a todo tipo de problemas (Proverbios 1:32; 15:10; 18:6–7), sin mencionar el hecho de que también son condenadas eternamente (Proverbios 11:7).Debido a que una persona justa lleva una vida recta que nadie puede criticar, no deja lugar para que nadie la culpe de nada de lo que ha hecho. José es un ejemplo perfecto de una persona que hizo todo lo posible para vivir una vida sincera basada en la honestidad. La confianza que puso en el Señor siempre permaneció firme, y lo que sus hermanos intentaron hacerle al final acabó formando parte de un plan que traería un bien mayor para muchas personas. José les dijo: "ustedes pensaron hacerme mal, pero Dios cambió todo para bien, para hacer lo que hoy vemos, que es darle vida a mucha gente" (Génesis 50:20).
Daniel es otro ejemplo de una persona cuya vida fue irreprochable. Después de que sus enemigos lo acusaran de haber hecho algo malo, finalmente Daniel acabó siendo arrojado en el foso de los leones, pero Dios lo protegió. Los leones no le hicieron daño y el rey ordenó que lo sacaran de allí. Sin embargo, los hombres malvados que acusaron a Daniel terminaron en el mismo foso de los leones, y los leones comenzaron a comérselos antes de que llegaran al suelo. Al final, su pecado acabó alcanzándolos (Daniel 6). Tal y como nos los señala este proverbio, el pecado de los enemigos de Daniel terminó convirtiéndose en su propia ruina.
Ambos ejemplos nos demuestran que la Biblia entiende a la perfección el sufrimiento humano. Un "proverbio" es una declaración general que proviene del sentido común y lo que es obvio. Las Escrituras dicen que incluso las personas buenas pueden acabar sufriendo en este mundo. Sin embargo, normalmente, las personas que hacen el bien se exponen mucho menos al sufrimiento y a las consecuencias del pecado que las personas que no lo hacen.