¿Qué significa Proverbios 14:17?

El peligro que tiene nuestro temperamento es que opera por instinto, no por sabiduría o templanza. Cuando una persona pierde los estribos debido a la menor provocación posible, sin motivo alguno, muestra lo necia que verdaderamente es (2 Pedro 2:12). Las personas que están completamente controladas por su temperamento dicen cosas de las que más tarde se arrepienten o hacen cosas que al final les acaban causando problemas (Proverbios 14:3, 14).

Las Escrituras les advierten a los creyentes que hagan todo lo posible para evitar que la ira los acabe controlando (Efesios 4:31). Santiago 1:19–20 enseña: "por eso, amados hermanos míos, todos ustedes deben estar dispuestos a oír, pero ser lentos para hablar y para enojarse, porque quien se enoja no promueve la justicia de Dios". Afortunadamente, el Señor puede transformar un corazón enojado y convertirlo en un corazón lleno de amor. Jesús transformó a Juan, el "hijo del trueno" en un apóstol que acabó hablando sobre la importancia del amor fraternal (Marcos 3:17; Lucas 9:54; 1 Juan 3:11).

Las personas que usan su astucia para conspirar y hacerles daño a los demás son personas malvadas. La gente acaba despreciándolos, sobre todo las personas a las que le hicieron daño. Esto nos podría ocurrir en el trabajo, dentro de nuestro vecindario e incluso dentro de la familia. Las personas que manipulan o conspiran para aprovecharse de los demás rara vez reciben el cariño y el respeto de la gente.