¿Qué significa Proverbios 16:8?

A los creyentes no se les garantiza que serán ricos (Juan 16:33; Mateo 6:19; 8:20). Sin embargo, todos los creyentes tienen acceso a una gran riqueza espiritual que procede de directamente de Dios (Mateo 5:3, 5). 2 Corintios 8:9 dice: "pues ustedes ya conocen la gracia de nuestro Señor Jesucristo que, por amor a ustedes, siendo rico se hizo pobre, para que con su pobreza ustedes fueran enriquecidos". Las riquezas espirituales incluyen la salvación, la paz con Dios, la seguridad del cielo, la comunión con Dios, la seguridad de Su presencia permanente, el gozo y una vida con propósito (1 Timoteo 6:6). Una persona puede llegar a ser rica económicamente, pero si no pertenece a la familia de Dios, está espiritualmente empobrecida, hasta el punto de estar en la bancarrota.

Salomón dice aquí que es mejor ser pobre y tener una buena reputación con Dios que vivir una vida injusta llena de riquezas materiales (Marcos 8:36). Todas las personas que se enriquecen usando el pecado serán castigados por el Señor. El dinero, las casas lujosas, la fama, los coches y las posesiones solo tienen valor en esta vida, pero no les servirán de nada a los ricos una vez estén ante Dios durante el día del juicio final. (Proverbios 15:16).