Verso

Proverbios 17:4

LBLA El malhechor escucha a los labios perversos, el mentiroso presta atención a la lengua detractora.
NBLA El malhechor escucha a los labios perversos; El mentiroso presta atención a la lengua detractora.
NVI El malvado hace caso a los labios impíos, y el mentiroso presta oído a la lengua maliciosa.
RV1960 El malo está atento al labio inicuo; Y el mentiroso escucha la lengua detractora.
JBS El malo está atento al labio inicuo; y el mentiroso escucha a la lengua maldiciente.

¿Qué significa Proverbios 17:4?

Un aspecto importante de las enseñanzas de Jesús pero que a menudo se pasa por alto es que Dios mira más allá de las acciones físicas. El Señor también se fija en nuestros motivos y actitudes tanto o incluso más que en otros aspectos de nuestra vida (Mateo 5:21–22, 27–28). El pecado no necesita practicarse para que acabe siendo un pecado, sino que el pecado es real incluso cuando solo forma parte de nuestras motivaciones.

Las Escrituras condenan el chisme y la calumnia (Levítico 19:16; Proverbios 11:13; Romanos 1:28–31). Sin embargo, las personas que se dedican a escuchar este tipo de cosas, incluidos los rumores y las tergiversaciones, también está cometiendo un pecado. Decir "no soy yo quien lo dijo, yo solo lo estaba escuchando" no sirve como excusa. De hecho, esto es tan malo como una persona que afirma y dice: "yo no cometí adulterio, solo fantaseé con la idea de hacerlo". Salomón está hablando aquí de las personas que se centran en la maldad y tratan de encontrarla para formar parte de ella.

Los chismes son verdaderamente tentadores (Proverbios 18:8), pero lo mejor es evitarlos a toda costa (Proverbios 20:19). Sin embargo, las Escrituras lo tienen claro, todos somos pecadores. Los seres humanos se sienten tentados continuamente por los chismes. Pablo escribe en Romanos 3:12–16: "todos se desviaron, a una se han corrompido. No hay quien haga lo bueno, ¡no hay ni siquiera uno! Su garganta es un sepulcro abierto, y con su lengua engañan. ¡En sus labios hay veneno de serpientes! Su boca está llena de maldición y de amargura. Sus pies son veloces para derramar sangre. Destrucción y desgracia hay en sus caminos…"

Otra cosa que se menciona en este versículo es la conexión que existe entre el habla y la condición espiritual interior de las personas (Lucas 6:45). Lo que una persona cree influye en su comportamiento y en su manera de hablar. Las personas que se dedican a escuchar a la maldad y a las personas que les encantan los chismes, las calumnias o las tergiversaciones, acaban formando parte de esa maldad ellas mismos, y además hay más posibilidades de que esas personas acaben cometiendo otros pecados.
Expand
Expand
Expand
¿Qué es el evangelio?
Download the app:
BibleRef.com is a ministry of