¿Qué significa Proverbios 2:18?
La consecuencia final del pecado es la muerte (Romanos 6:23). Este pasaje está usando la metáfora de una mujer ajena para representar el pecado. En este versículo, su casa nos conduce hacia la muerte, lo cual implica que este es un proceso lento y gradual. Quienes viven en una casa no son capaces de notar el sutil hundimiento y asentamiento que se produce de forma natural. Sin embargo, si solo una pequeña porción de los cimientos estuviera en malas condiciones o fuera de lugar, la casa se acabaría hundiendo de manera progresiva. A menudo, este hundimiento pasa desapercibido hasta que la casa se rompe sin dejar ningún tipo de posibilidad para repararla. Esa es la razón por la que David dice esto en el Salmo 139:23: "Señor, examina y reconoce mi corazón: pon a prueba cada uno de mis pensamientos". Dios es "el inspector de viviendas" más importante; el único que tiene la capacidad de encontrar grietas en los cimientos y el único que puede ayudarnos a arreglarlas.Otra analogía con la que podemos comunicar esta idea es la de un tren, ya que un tren solo puede dirigirse hacia donde se dirigen sus vías. Las huellas del pecado nos conducen a la muerte. Si bien puede ser relativamente fácil detener un tren que acaba de comenzar a moverse, una vez que está acelerando por las vías, es casi imposible detenerlo.