¿Qué significa Proverbios 22:1?
Si se nos diera la opción de elegir entre tener una buena reputación o mucho dinero, muchas personas elegirían el dinero. Sin embargo, Salomón dice aquí que es mejor que nos conozcan por nuestra integridad y moralidad que por ser ricos y que la gente nos pueda asociar con el pecado (Proverbios 3:1–5; 19:1). El dinero no puede comprar directamente la felicidad, la paz, la seguridad o la vida eterna. Sí es cierto que tiene muchas ventajas, pero todas esas ventajas son ventajas meramente temporales. Una buena reputación edificada sobre la fe en Cristo (2 Pedro 1:5–8, 11) va acompañada de gozo, paz con Dios, seguridad y vida eterna. Una persona a la que se le conoce por su bondad recibe más ayuda y honra de las personas que la rodean (Proverbios 10:7; 11:10).La madurez espiritual que nos lleva a tener una buena reputación también produce confianza y honor. El capítulo 31 de Proverbios nos describe a una mujer cuya reputación es intachable: "su esposo confía en ella de todo corazón, y por ella no carece de ganancias" (Proverbios 31:11) y más adelante ese mismo pasaje dice: "sus hijos se levantan y la llaman dichosa; también su esposo la congratula" (Proverbios 31:28). El dinero no puede comprar la admiración y el amor de los demás, pero un carácter noble que crea una buena reputación puede ganarse la admiración y el amor de muchas personas.