¿Qué significa Proverbios 22:18?

Todos los "proverbios" representan declaraciones generales de sabiduría que, aunque normalmente describen la realidad tal y como es, en contadas ocasiones estos proverbios no se adaptan a ciertas ocasiones específicas. Las personas que siguen buenos consejos (Proverbios 12:15) y los aplican (Proverbios 1:33) tienen más posibilidades de vivir mejor que las personas que no lo hacen (Proverbios 8:34–36). Cuando seguimos la sabiduría de Dios (Proverbios 1:7) evitamos mucho más las consecuencias del pecado (Proverbios 10:16).

Salomón quiere que el lector "las guarde" dentro, es decir, que las memorice. El salmista escribe en el Salmo 119:11: "en mi corazón he atesorado tus palabras, para no pecar contra ti". En el versículo 97 escribe: "¡cuánto amo yo tus enseñanzas! ¡Todo el día medito en ellas!" En el versículo 103 exclama: "¡cuán dulces son tus palabras en mi boca! ¡Son más dulces que la miel en mis labios!"

Sin embargo, el simple hecho de recordar las enseñanzas del Seños no es suficiente; las personas también deben "afirmarlas con los labios". Es importante saber cómo aplicar las Escrituras en cada una de las situaciones en las que nos encontramos. Las Escrituras estaban listas en los labios de Jesús cuando tuvo que enfrentarse a las tentaciones de Satanás en el desierto, a quien le respondió tres veces citando las Escrituras (Mateo 4:4, 7, 10). El apóstol Pablo enfatiza el papel tan importante que juega la Palabra de Dios en las batallas del cristiano contra Satanás diciendo: "cúbranse con el casco de la salvación, y esgriman la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios." (Efesios 6:17).