Verso

Proverbios 23:4

LBLA No te fatigues en adquirir riquezas, deja de pensar en ellas.
NBLA No te fatigues en adquirir riquezas, Deja de pensar en ellas.
NVI No te afanes acumulando riquezas; no te obsesiones con ellas.
RV1960 No te afanes por hacerte rico; Sé prudente, y desiste.
JBS No trabajes por ser rico; desiste de tu propia sabiduría.

¿Qué significa Proverbios 23:4?

Los versículos 4 y 5 nos hablan en contra del deseo de hacernos ricos. Otros pasajes del libro de Proverbios también nos hacen advertencias en contra de la pereza (Proverbios 6:10; 10:4; 19:15, 24). Sin embargo, también existe el peligro querer hacernos ricos a expensas de la salud, la vida familiar u otras necesidades básicas. Las Escrituras enmarcan esto como si fuera un problema de discernimiento: una situación que requiere tener buen juicio. Una persona sabia y trabajadora reconoce la importancia que tiene el hecho de descansar. Tener una ética de trabajo firme no es lo mismo que ser un adicto al trabajo.

Específicamente, Salomón dice que cuando la búsqueda de la riqueza se convierte en nuestro único objetivo, siempre acabamos sufriendo. Por lo tanto, debemos resistirnos ante la tentación de trabajar únicamente para enriquecernos, y debemos evitar sacrificar otro tipo de necesidades para poder aprovecharnos de otras oportunidades adicionales para ganar más dinero. Por supuesto, a veces las circunstancias nos obligan a trabajar más de lo debido. Sin embargo, eso debería ser una excepción y no una regla.

Las personas piensan que el mayor objetivo es hacerse rico, pero Dios piensa justamente lo contrario (Proverbios 23:5). Jesús dijo a sus discípulos: "trabajen, pero no por la comida que perece, sino por la comida que permanece para vida eterna, la cual el Hijo del Hombre les dará; porque a éste señaló Dios el Padre" (Juan 6:27). Jesús también dijo: "no acumulen ustedes tesoros en la tierra, donde la polilla y el óxido corroen, y donde los ladrones minan y hurtan" (Mateo 6:19). Salomón escribe en Eclesiastés 5:10: "quien ama el dinero, jamás tiene suficiente. Quien ama las riquezas, nunca recibe bastante. ¡Y también esto es vanidad!". Muchas personas materialistas han descubierto esta verdad a la fuerza y se han dado cuenta de que nunca están satisfechos con su riqueza material y siempre anhelan tener más.
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