¿Qué significa Proverbios 23:7?
Salomón nos explica el por qué es mejor evitar aceptar la hospitalidad de alguien que sea "ávaro" o tacaño. En hebreo (Proverbios 23:6) dice que esa persona tiene el "mal de ojo". En este versículo se nos da un poco de contexto para entenderlo. El anfitrión que está siendo representado aquí no está siendo generoso por amor o generosidad, sino todo lo contrario: esta persona da a regañadientes y con la expectativa de ser recompensado de alguna manera.Las Escrituras describen a este tipo de anfitriones como si fueran “calculadores". Este tipo de personas fingen ser amables, pero en realidad no le desean lo mejor a su invitado, o quizás se arrepienten del costo de la comida con la que están agasajando al invitado o intenta engañar al invitado para al final aprovecharse de él. Cuando alguien se da cuenta de que la "hospitalidad" que le han ofrecido ha sido en realidad un intento de soborno o manipulación, a esa persona le dan ganas de escupir en lo que ha comido (Proverbios 23:8). Tanto el tiempo que pasaron juntos como la conversación son un desperdicio.
La Biblia dice que no debemos llenar nuestro corazón con preocupaciones materialistas ni amar el dinero. La preocupación que tiene el hombre tacaño debido al costo de la comida es lo contrario a lo que Jesús nos enseñó acerca del materialismo, por eso os dijo: “por lo tanto les digo: no se preocupen por su vida, ni por qué comerán o qué beberán; ni con qué cubrirán su cuerpo. ¿Acaso no vale más la vida que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?" (Mateo 6:25), y después añadió: "por lo tanto, no se preocupen ni se pregunten “¿qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?" (versículo 31). Pablo animó a Timoteo para que les hiciera una advertencia a los creyentes acerca de los peligros que acarrea el amor al dinero y sobre la importancia que tiene el hecho de ser generosos con los demás (1 Timoteo 6:17–18).