¿Qué significa Proverbios 24:18?

Apreciar los momentos en los que Dios aplica Su justicia es diferente de alegrarse de los momentos en los que las personas están sufriendo (Proverbios 17:5; 24:17). El versículo anterior dijo que es un pecado regodearse —celebrar o disfrutar— del sufrimiento de nuestros enemigos. Aquí, esa idea se enfatiza nuevamente mientras que se nos sugiere que Dios podría disminuir la dureza de Su castigo cuando sus enemigos deciden burlarse de su sufrimiento. La idea no es que Dios se olvida de los pecados de otras personas, sino que complacerse del sufrimiento de una persona "malvada" es, en sí mismo, algo malvado. Si las dos personas son malvadas, al fin y al cabo, ¿por qué debería Dios favorecer a uno y no al otro?

En lugar de regodearse con los problemas del enemigo, los creyentes deben mostrar compasión y tratar de guiarlos hacia el arrepentimiento y la fe. Las personas malvadas son como cualquier otro no creyente. Las Escrituras los comparan con ovejas perdidas. Como el Buen Pastor, los creyentes deben esforzarse por buscar y encontrar a las personas que se han perdido (Mateo 28:19–20; Lucas 19:10) y llevarlos a Dios (Lucas 15:4–7). Ezequiel 18:21–22 cita al Señor diciendo: "pero si el malvado le da la espalda a todos los pecados que cometió, y cumple todos mis estatutos y actúa con apego al derecho y la justicia, no morirá, sino que vivirá. No le será tomada en cuenta ninguna de las transgresiones que haya cometido, sino que vivirá por actuar con justicia". El siguiente versículo nos explica que el Señor no disfruta cuando la gente sufre, incluso por sus propios pecados, sino que prefiere que se arrepientan y alcancen la salvación (Ezequiel 18:23).