¿Qué significa Proverbios 27:1?

Nadie puede predecir lo que sucederá en el futuro. Algunas veces sí podemos imaginarnos lo que ocurrirá debido a los patrones que siguen las personas o las cosas, como que mañana saldrá el sol. Hay situaciones que dependen de las circunstancias, pero hay cosas que son totalmente impredecibles. Una persona sabia hace planes (Proverbios 16:3; 20:18; 24:27) pero teniendo en cuenta el hecho de que, en realidad, sabe que no puede controlar nada en última instancia. Sin embargo, es mejor tomar decisiones usando la razón que ignorar los posibles riesgos a los que nos podríamos tener que enfrentar en el futuro.

El verbo "ufanarse" se traduce con el verbo "alabar" más adelante en este pasaje (Proverbios 27:2). Nadie debe elogiarse a sí mismo por lo que aún no ha logrado hacer o conseguir. Tal y como decimos en español: "no vendas la piel del oso antes de cazarlo". Aunque algunas veces podemos intuir lo que va a ocurrir, en última instancia, no podemos estar seguros de nada. El apóstol Santiago habla sobre esto en Santiago 4:13–16: "ahora escuchen con cuidado, ustedes los que dicen: 'hoy o mañana iremos a tal o cual ciudad, y estaremos allá un año, y haremos negocios, y ganaremos dinero. ¡Si ni siquiera saben cómo será el día de mañana! ¿Y qué es la vida de ustedes? Es como la neblina, que en un momento aparece, y luego se evapora. Lo que deben decir es: «si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello'. Pero ustedes se jactan con arrogancia, y toda jactancia de este tipo es mala". Por lo tanto, en lugar de ser confiados, debemos ser humildes cuando se trata de intuir lo que ocurrirá en el futuro.