¿Qué significa Proverbios 8:13?
Las Escrituras dicen que el "temor" de Dios es un aspecto crucial de la sabiduría y el aprendizaje (Proverbios 1:7). El término "miedo", tal y como se usa en esta expresión, no se refiere al terror o al pánico. Más bien, el temor de Dios se refiere a un tipo de honor sumiso y respetuoso. En realidad, sí que puede haber una sensación de aprensión, similar al "miedo" saludable que les tenemos a cosas como el fuego o las máquinas, pero aquí no nos estamos refiriendo a un tipo de miedo que es paralizante. Este versículo nos ayuda a entender qué es "el temor del Señor". En esencia, significa reconocer la santidad y la bondad de Dios, e intentar mantenernos cerca de ellas todo el tiempo; significa odiar y rechazar todo lo que en contra de estas cosas.El temor del Señor hace que Su pueblo odie el mal, rechace el orgullo, la arrogancia y todo tipo de corrupción. El pecado no es simplemente un momento en el que cometemos un error, sino que debe entenderse como una ofensa en contra de Dios. Por esto, no debemos tolerar ningún tipo de pecado en nuestras vidas; debemos aborrecerlo tal y como lo hace Dios. El apóstol Juan nos anima en 1 Juan 1:9 a confesar nuestros pecados. "Confesar" significa hablar del pecado de la misma manera que Dios habla del pecado: tener la misma actitud que Dios tiene hacia el pecado. Nuestro odio hacia el pecado se intensifica cuando reflexionamos en el hecho de que Cristo sufrió una gran miseria e incluso la muerte debido a nuestros pecados (1 Corintios 15:3).
Si tememos al Señor, también acabaremos odiando la soberbia y la arrogancia. Estas actitudes inmorales fueron una parte fundamental de la rebelión que Lucifer comenzó en contra de Dios. Isaías 14:12–14 nos habla del plan que Satanás ideó para derribar a Dios de Su trono y tomar posesión de él. Lucifer dijo: "subiré hasta las altas nubes, y seré semejante al Altísimo" (Isaías 14:14). Su orgullo estaba marcado por la corrupción, y Jesús dijo de él que es "mentiroso y padre de mentira" (Juan 8:44).