¿Qué significa Romanos 2:6?
En los versículos anteriores, Pablo ha condenado duramente a cualquier persona moral o religiosa culpable de juzgar a otros por su pecaminosidad (Romanos 2:1–3). Pablo ha insinuado la verdad que explicará en el siguiente capítulo: todos somos pecadores (Romanos 3:23). Ninguno de nosotros debería suponer que Dios no expresará Su ira sobre nosotros debido a nuestra pecaminosidad.Ahora Pablo comienza a describir la ley absoluta sobre quién recibirá la vida eterna con Dios, y quién recibirá Su "ira" (Romanos 2:8). Pablo cita el Salmo 62:12 y Proverbios 24:12 para articular la verdad universal de que Dios juzgará a cada persona de acuerdo con lo que ha hecho. Pablo describe en los siguientes versículos la diferencia entre aquellos que recibirán la ira o la recompensa de Dios.
Sacado de contexto, esta es una afirmación preocupante. Pablo parece indicar que Dios juzga a todas las personas en base a su comportamiento. Sin embargo, esta es la misma idea que Jesús mismo expresó (Mateo 16:27). En términos de recompensa, esto es absolutamente cierto; cada persona es juzgada sobre en base a sus obras (Romanos 14:10–12; 2 Corintios 5:10). Sin embargo, como Pablo aclarará en esta carta, nadie puede ser salvo a través de sus buenas obras (Romanos 3:23). Nuestra única esperanza de salvación, para ser rescatados de la pena de nuestro pecado, es la gracia, mediante la fe en Jesucristo.