¿Qué significa Romanos 3:17?
Pablo concluye aquí la cita que está utilizando de Isaías 59:7–8. Pablo ha usado las palabras de Isaías para proporcionar más evidencia del Antiguo Testamento de que los seres humanos son pecadores por naturaleza. Todos merecemos el juicio y la ira de Dios, sin excepciones (Romanos 3:10) y sin excusas (Romanos 1:18–20). Pablo ha estado de acuerdo con Isaías acerca del hecho de que nuestros pies se mueven rápidamente a la hora de llevarnos a lastimar a otros, incluido el derramamiento de sangre, y que dejamos un rastro de miseria por dondequiera que vayamos.Ahora, Pablo cita la última frase de Isaías 59:8 para mostrar algo aún peor: ya es bastante malo que nuestros pies nos lleven hacia el pecado y la violencia, pero cuando se trata de la humanidad, en general, no sabemos hacer otra cosa. Aparte de la intervención de Dios, los seres humanos nunca han experimentado el "camino de la paz" o un camino pacífico por sí solos. De hecho, no podemos encontrarlo, y no sabemos cómo ir por ese camino; por lo tanto, nuestra propia naturaleza nos hace cometer el pecado, y también nos lleva a provocar todo tipo de conflictos; nosotros mismos somos los que lo creamos y lo provocamos a lo largo del camino.
Sin embargo, Pablo mostrará pronto que, con la ayuda de Dios, a través de la fe en Cristo y por la gracia de Dios, podemos escapar de los senderos pecaminosos y dolorosos del pecado y caminar por el camino de la justicia.