¿Qué significa Marcos 1:15?

La primera cita directa de Marcos sobre Jesús es el anuncio de que el reino de Dios había llegado. El mensaje del evangelio incluye un sentido de urgencia, especialmente por el hecho de que Jesús está en vivo y en persona entre aquellos a quienes enseñaba. La espera se había terminado, el futuro cumplimiento de las profecías mesiánicas había llegado; Jesús ahora está en escena cumpliendo las palabras de Dios entre el pueblo de Dios (Gálatas 4:4). Los eruditos nombran cientos de profecías en el Antiguo Testamento sobre la venida del salvador de Israel. A pesar de esto, los judíos no tenían una idea exacta de lo que era el Reino de Dios y de lo que el Mesías haría por ellos. Creían que el Mesías los conduciría hacia la independencia política, la paz civil y la prosperidad personal. En lugar de ser venir como un campeón militar, Jesús vino tan manso como un cordero (Juan 1:29), no para eliminar la barrera entre los judíos y la prosperidad, sino para eliminar la barrera entre toda la humanidad y Dios mismo.

El mensaje de Juan el Bautista era arrepentirse y creer que la salvación estaba por llegar. El mensaje de Jesús es arrepentirse y creer en la salvación que ya estaba allí. Arrepentirse, del griego metanoeo, significa "cambiar de opinión" y "aceptar que los pecados de uno son aborrecibles"; no es solo el hecho de tener remordimiento por el pecado, sino que el arrepentimiento también debe provocar un cambio de actitud que nos lleve a servirle a Dios continuamente. Creer, del griego pisteuo, significa "estar completamente convencido". "Creer" y "arrepentirse" van de la mano: es imposible creer plenamente en el mensaje de salvación de Jesús y no apartarse de nuestros pecados (1 Juan 3:4–6). Los cristianos nunca serán perfectos en esta tierra, pero la inclinación que nos lleva a vivir una vida pecaminosa se debe transformar en un deseo de vivir para servirle a Dios continuamente.